25. Desaprendizaje

  1. Existe un aprendizaje positivo de nociones, ideas, doctrinas…  
  2. Y un aprendizaje, también positivo, de habilidades, adiestramientos, actitudes.
  3. Y un singular modelo de aprendizaje, aparentemente negativo: aprender a desaprender.

«Aprender a desaprender»

Ciudad Redonda. Un lugar para compartir lo que somos. Aunque formulado con una paradoja, que parece acentuar lo negativo, es un alto modelo 'positivo de aprendizaje.

Hay un refrán de la antigüedad que dice: 'en cierto momento de la vida, si quieres aprender y progresar, tienes que aprender a 'desaprender'. Una razón casi intuitiva, puede interpretarse así: 'frecuentemente lo aprendido nos cristaliza, nos estanca, nos endurece, nos cierra. Si quieres seguir aprendiendo y progresando, tienes: que 'desaprender', encontrar el 'silencio' como una pedagogía nueva este aprendizaje.

Todo camino/que sea realmente tal y que progrese, se funda en la renuncia permanente a lo anterior, sin estancarse nunca en nada.., Y dejar no significa realmente prescindir de lo. que se ha hecho sino ahondarlo. La rutina estanca. No significa, por ejemplo, que sí rezas el Padre nuestro, tengas que dejar de rezarlo, sino que ahondes… tus motivos, tu conciencia, su receptividad.

Este es el aprendizaje que nos interesa cuando queremos fundamentar un proceso serio, hondo, realmente responsable de vida interior, que no excluye las otrasformas de aprendizaje indicadas.

Desaprender es una auténtica forma  de aprendizaje.

Se desaprenden modelos cerrados y  se sustituyen por un modelo abierto.
Se desaprenden modelos de tensión corporal y mental; se desaprenden modelos de ansiedad permanente o recurrente; se desaprenden mecanismos de defensa; se desaprenden modelos de apegos, de dependencia; se desaprenden modelos verbales estereotipados; se desaprenden modelos repetitivos de conducta superflua, extraña, automática.

Se aprende espontáneamente, a partir del desaprendizaje y de la destrucción de modelos negativos. Se aprende a sentirse abierto, disponible, acogedor; receptivo. Se aprende a vivirse sin atributos, sin tantos adjetivos, buenos o malos, que nos hemos ido añadiendo o que nos han añadido, Se aprende a vivir sin el condicionamiento de las etiquetas.

Así se aprende a ser discípulo, pobre y acogedor.

Es dificultoso porque implica desmantelar, deshacer hábitos y costumbres ya asumidas, y muy sintonizadas Con el amor propio y nuestros mecanismos protectores, de defensa.
Ese desaprendizaje básico favorece, desde la fe, el sublime aprendizaje que realiza quien se convierte en discípulo pobre y acogedor, que se deja enseñar por Dios, sin ruido de palabras,

Toda la trayectoria de la enseñanza de san Juan de la Cruz,, es como un laborioso e inteligente modelo de desaprendizaje, de desposesión, de pobreza.

Este aprendizaje es el más radical y el que mejor cuadra con una seria transformación de la conciencia cristiana.