Comentario Seglar al Evangelio del Domingo 1 de Marzo de 2020 (Primer Domingo de Cuaresma)

28 de febrero de 2020

LECTIO DEL DOMINGO I TIEMPO DE CUARESMA – CICLO A

PRIMER PASO: LECTIO
¿Qué dice el texto?

Lectura del santo evangelio según san Mateo 4,1-11

Jesús ayuna cuarenta días y es tentado

En aquel tiempo, Jesús fue llevado al desierto por el Espíritu para ser tentado por el diablo. Y después de ayunar cuarenta días con sus cuarenta noches, al fin sintió hambre. El tentador se le acercó y le dijo: "Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en panes." Pero él le contestó, diciendo: "Está escrito: "No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.""
Entonces el diablo lo lleva a la ciudad santa, lo pone en el alero del templo y le dice: "Si eres Hijo de Dios, tírate abajo, porque está escrito: "Encargará a los ángeles que cuiden de ti, y te sostendrán en sus manos, para que tu pie no tropiece con las piedras."" Jesús le dijo: "También está escrito: "No tentarás al Señor, tu Dios.""
Después el diablo lo lleva a una montaña altísima y, mostrándole los reinos del mundo y su gloria, le dijo: "Todo esto te daré, si te postras y me adoras." Entonces le dijo Jesús: "Vete, Satanás, porque está escrito: "Al Señor, tu Dios, adorarás y a él solo darás culto.""
Entonces lo dejó el diablo, y se acercaron los ángeles y le servían.

NOTAS BÍBLICAS
(por el equipo coordinador, con el apoyo de un biblista)

Toda la escena sabe al «éxodo»: el desierto, el número «cuarenta», las pruebas o tentaciones, sentir hambre… todo eso son cosas que el pueblo de Israel experimentó tras salir de Egipto. Jesús pasa por lo mismo, con la diferencia que el pueblo fracasó en la prueba y en cambio Jesús se mantiene fiel a Dios.
El diablo (al que Jesús al final llama «Satanás») pone a prueba la obediencia de Jesús a Dios, que acaba de declararle «hijo» tras su bautismo: Si eres Hijo de Dios… El diablo trata de que Jesús le obedezca, de que haga lo que él le sugiere, poniéndole como justificiación que tiene que demostrar que es Hijo de Dios. Los mismos desafíos vuelven a tentarle en la cruz: «¡si eres Hijo de Dios sálvate a ti mismo bájate de la cruz!», le dice uno de los crucificados (Mateo 27, 38).
El diablo revela que controla los reinos de este mundo. Con la misma palabra (reino) Jesús anunciará el comienzo del de Dios.

SEGUNDO PASO: MEDITATIO
¿Qué nos dice el texto?

Distintos laicos hacen una breve sugerencia para la vida seglar. Cada uno contempla el Evangelio desde una dimensión de la vida laical.

DESDE LA RELIGIOSIDAD POPULAR
(hombre, casado, trabaja, dos hijos, cofrade y hermano de varias hermandades de penitencia)

Son muchas las tentaciones que el diablo me ha puesto en mi camino cofrade, muchas de ellas disfrazadas de bondad o de “ángel de luz”. Unas veces tuvo la culpa mi edad y mi falta de madurez en la Fe; otras el ansia de la “gloria” formando parte por ejemplo de una Junta de Gobierno, tomando decisiones y asumiendo responsabilidades, creyendo que yo no me iba a equivocar dónde otros se habían equivocado, y otras veces “dándome el poder” de que con un toque de llamador “Nuestro Señor” o “Nuestra Madre”, levantaran su paso. ¡ Cómo intenta engañarnos el tentador…!
Hoy, al paso de los años, mi Fe ha ido madurando, aprendí a ver a Jesús en el Sagrario y desde ahí, decirle al demonio que se vaya y que me deje en paz y le doy gracias a Dios por enseñarme que en lo pequeño y en el servicio es dónde mejor puedo reflejar el amor de Dios en mi cofradía.

DESDE LA ENFERMEDAD
(mujer, casada, jubilada, convaleciente, pertenece a comunidad cristiana y movimiento seglar)

Percibo que aquí, cuando hablamos de tentación, nos estamos refiriendo a algo que es malo, a algo que viene del maligno. Pero la verdad es que la tentación se nos presenta de muchas formas. Incluso, pueden ser personas que nos quieren las que nos inducen y tientan a hacer determinadas cosas.  En estos momentos y tras mi problema de salud, algunos me instan y me apremian a que deje todas esas  actividades en las que estoy comprometida y que forman parte de mi día a día, con el deseo de que lleve una vida tranquila, sin responsabilidades, sin complicaciones, sin stress. Incluso me dicen que ya es hora de que dedique el “tiempo para mí”. Sus intenciones son buenas. Pero no me resigno a llevar una vida light. Y tengo dudas.  Me pregunto cuáles son los comportamientos y formas en los que no debo caer. Creo que, si mis obras y aptitudes no van encaminadas a construir Reino, son una tentación que me leja de Dios y de los demás, y por tanto, no debo caer en ellas.
Cuantas veces en el Padrenuestro digo “No de mejes caer en la tentación”. Pues le pido al Señor no caer en la tentación: de que soy imprescindible, de creer que todo está en mis manos, de creerme autosuficiente, de prescindir de Dios en mí vida. Quiero aprender a decir no a las tentaciones que crean muerte. Decir no a las distracciones que hacen que no me centre en lo realmente importante. Decir no a los compromisos innecesarios. Quiero ser dueña de mis tentaciones y que no sean ellas las que se adueñen de mí.   
Líbrate Señor, de esos espejismos que prometen vida y esconden vacío.

TERCER PASO: ORATIO
¿Qué nos hace decir el texto?

(hombre, casado, trabaja, pertenece a movimiento cristiano)

Cristo Jesús,
llenas de sentido y esperanza
nuestra confianza,
nuestra lucha
nuestro crecimiento espiritual.

Cristo Jesús,
nos enseñas
el camino de santidad y justicia:
confiar sobre toda confianza
en el Padre
y alimentar a los hambrientos,
sea cual sea su hambre…
sanar a los enfermos,
sea cual sea su enfermedad…
acoger a todos
sean cuales sean las circunstancias
que la vida les pone por delante.

Cristo Jesús,
en este tiempo de cuaresma,
en este tiempo
de lucha y esperanza
dame tu Espíritu
para que sepa darme cuenta
de que lo fácil,
lo cómodo,
el triunfo a los ojos del mundo
acaso no sea lo verdadero
bajo tu mirada.

Cristo Jesús,
en este tiempo
crecimiento en santidad y justicia,
ilumina mi libertad y mi conciencia
para que no anteponga mis deseos,
tan hijos de la publicidad,
a las necesidades reales
de los que me rodean
cotidianamente.

Cristo Jesús,
en este tiempo de conversión y de despojamiento,
ilumina mi corazón y mis entrañas,
para no descargar responsabilidades
cuando aparecen
las complicaciones
en la construcción cotidiana
de ese mundo mejor
que anhelan tantos corazones.

Cristo Jesús,
en este tiempo de toma de conciencia
y de acciones concretas,
ilumina mi mirada y mi sensibilidad
con la sabiduría
que proviene
de tu presencia
en los más débiles,
en los más desposeídos,
en los más empequeñecidos.

Cristo Jesús,
dame inteligencia
para identificar el mal…
especialmente el que brota
de las tentaciones
que anidan en mi interior…
dame valentía
para combatirlo
con las armas
de la bondad
y la no-violencia…
dame humildad
y serenidad
para seguir caminando
por las sendas,
del Reino de Dios,
muchas veces apenas intuidas
en estos tiempos tan extraños.

CUARTO PASO: CONTEMPLATIO
¿Quién dice el texto?

(Autorizado por el autor, Fano en www.diocesismalaga.es)

ÚLTIMO PASO: ACTIO
¿A qué nos lleva el texto?

(matrimonio, 2 hijos, él trabaja, el matrimonio pertenece a comunidad cristiana y a movimiento seglar)

En nuestro complejo mundo, es probable que ni siquiera seamos conscientes de muchas de las invitaciones que recibamos a vivir de una manera incompatible con las que propone el reinado de Dios Es decir, al contrario de cómo se presenta en este texto del Evangelio, es posible que las tentaciones que suframos hoy nosotros no las percibimos como tales. Incluso sentiremos como aspiraciones honorables lo que en el fondo corresponden con tentaciones de poder, de tener…
Pero, ¿cuál fue el proceder de Jesús? Él, en este pasaje, para dar respuesta a las tentaciones se basa siempre en los textos de la tradición de su tiempo. En la sabiduría acumulada de un pueblo que siente y descubre en su historia la presencia de un Dios salvador.
Esta es precisamente nuestra propuesta para esta semana. Para hacernos conscientes de nuestras tentaciones en primer lugar y para darle una respuesta cristiana a las mismas os invitamos a dos cosas: una lectura más intensa de los Evangelios y la lectura de un libro de espiritualidad o de teología que nos ayude en este sentido. Son muchas y muy profundas las reflexiones realizadas por personas que dedican a ello su inteligencia y su vida. Sin embargo, es una sabiduría que en gran parte no llega a la mayoría del pueblo cristiano. No desaprovechemos esa oportunidad y a través de internet o de la librería religiosa de nuestra ciudad encarguemos un buen libro para esta cuaresma.