Pero… ¿Qué es la Tasa Robin Hood?
Se trata de la defensa de un impuesto financiero global. Una tasa que se aplicaría a las transacciones financieras con el objetivo de recaudar fondos para luchar contra la pobreza y el cambio climático. Según cálculos de las entidades impulsoras se podrían recaudar más de 300.000 millones de euros anuales.
El objetivo se plantea en todo el mundo sobre las operaciones financieras no minoristas, es decir, sobre intercambio de acciones, bonos, derivados financieros, operaciones en divisas o de materias primas. Está prevista en mercados organizados y en operaciones extrabursátiles, pero no afectaría a las operaciones corrientes, esto es, «no recaería sobre la gente corriente».
Si por cada transacción se abonara un impuesto del 0,05%, se llegarían a recaudar unos 300.000 millones de euros al año.
¿Quién apoya esta tasa?
Un millar de economistas de 53 países distintos enviaron hace dos semanas una carta al G-20 (el grupo formado por las grandes potencias económicas y las emergentes) para reclamar la implantación de lo que se ha bautizado por las ONG como tasa Robin Hood,. En la lista de economistas figuran nombres como el de Jeffrey Sachs, de la Universidad de Columbia, o Dani Rodrik, de Harvard.
Recientemente, Dominique Strauss-Kahn,director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), quien, dicho sea de paso, se perfila como uno de los posibles candidatos socialistas y rival de Nicolas Sarkozy en las elecciones presidenciales francesas que se juegan de 2012, pronunció este discurso:
“La mano invisible, esa que Adam Smith creía capaz de mover con diligencia al mercado, no debería convertirse en «un puño». El antiguo modelo de globalización, que sacó de la pobreza a millones de personas, tenía, al cabo, una cara oculta: un creciente abismo entre ricos y pobres. La mundialización financiera ha aumentado las desigualdades. Es hora de una globalización más justa.”
Strauss-Kahn, no llegó a utlizar el términdo “Tasa Robin Hood”, pero defendió la implantación de un impuesto a las actividades financieras para obligar a la banca a absorber parte de los costes sociales de su comportamiento de vértigo, germen de la tormenta financiera. Reclamó la mejora de la supervisión mundial y un marco macroeconómico para un «nuevo mundo».
2011: un año decisivo
La portavoz de la Alianza Tasa Robin Hood, Susana Ruiz, estima que 2011 es «un año decisivo» y solicita la ayuda de los países industrializados para, entre todos, «cambiar las malas prácticas» y superar la actual crisis económica. Recuerda que esta situación ha supuesto un empeoramiento de las condiciones de vida de numerosas personas, «tanto aquí como en los países pobres», y lamenta que las cifras de pobreza extrema son más altas que nunca. La crisis ha generado 30 millones de parados en el mundo y un alejamiento de la consecución de los ODM.
Estas entidades aseguran que el 80% de las transacciones financieras internacionales «son esencialmente especulativas y suponen un riesgo para la estabilidad económica mundial». Por ello, apuestan por repartir entre todos. El objetivo es animar a los ciudadanos a pedir la aplicación de esta tasa a través de las redes sociales, para que el mensaje llegue a un buen número de personas y tener más apoyo.
¿Supondría un cambio realmente esta tasa?
Las organizaciones impulsoras de esta iniciativa han calculado las cifras de la tasa y sus logros, se resumirían de la siguiente manera:
– En 17,5 horas de aplicación, se cubriría el fondo trianual para la erradicación de la polio.
– En 8 días, se recaudarían fondos para garantizar educación primaria a los 72 millones de niños que no van a la escuela.
– En 3 meses y medio, se cubriría el coste para la adaptación al cambio climático de los países en desarrollo.
– En España, la aplicación de la tasa recaudaría hasta 6.300 millones de euros anuales.
Las estimaciones apuntan que este impuesto podría generar entre 150.000 y 520.000 millones de euros en todo el mundo, una cantidad que por ahora, se ha propuesto destinar a:
– Mejorar los servicios públicos.
– Ayudar a las personas más afectadas por la crisis económica.
– Reducir la pobreza en el mundo.
– Ayudar a los países más pobres a adaptarse al cambio climático.
Si quieres más información…
La iniciativa ya cuenta con su propio sitio en Factbook y con Twitter (@tasarobinhood), donde podrás encontrar toda la información que necesites para apoyar esta iniciativa que ya cuenta con el respaldo de numerosas organizaciones reconocidas
Extraído de Fundacion Proclade
Fuente de imagen: Depositphotos