Según los datos hechos públicos esta mañana en Madrid, la Confederación Cáritas Española –integrada por 68 Cáritas Diocesanas y más de 6.000 Cáritas Parroquiales— destinó en 2008 a sus programas sociales un total de 216.916.013 euros, de los que se beneficiaron 9.102.406 personas dentro y fuera de España. Estos datos confirman que los recursos invertidos por Cáritas en 2008 suponen un incremento del 8 por ciento con relación al ejercicio de 2007
Junto a los datos que se recogen en la Memoria anual, en la rueda de prensa se presentó también el III Informe del Observatorio de la Realidad de Cáritas sobre la evolución de las demandas de ayuda urgente atendidas por la red confederal de Acogida y Atención Primaria durante el primer semestre de 2009. En dicho Informe se constata que las demandas de ayuda urgente atendidas por Cáritas es la primera mitad del presente año han aumentado un 40,7 por ciento con relación a 2008 y que la mayoría de las respuestas de Cáritas se dirigen a paliar problemas urgentes relacionados con gastos de alimentación y de vivienda. Concretamente, las demandas de ayuda para alimentación aumentaron un 58 por ciento en ese período, mientras que las de vivienda crecieron un 44.9 por ciento.
En la rueda de prensa han comparecido el presidente de Cáritas Española, Rafael del Río; el director de los Servicios Generales de la institución, José Luis Pérez Larios; y la coordinadora del Area de Análisis Social y Desarrollo, Ana Abril.
Ante la crisis, Cáritas responde
Como ha señalado José Luis Pérez Larios a la vista del balance global que ofrecen los datos de la Memoria 2008, puede decirse que “ante la situación de crisis que estamos viviendo y ante la gravedad de sus efectos sociales en las personas más vulnerables, Cáritas responde, y responde con todos sus recursos”.
Una buena muestra de cuál esta siendo esa respuesta lo ofrecen las cifras de actividad que se recogen en el apartado de Acogida, Atención Primaria y Acción de Base de la Memoria 2008, que experimentan un incremento superior al 20 por ciento y supusieron una inversión de casi 24,8 millones de euros.
Junto a las acciones de Acogida, el mayor esfuerzo económico realizado por Cáritas en 2008 se centró también, entre otros, en el programa de Mayores, al que se destinaron casi 32 millones de euros, seguido de Cooperación Internacional (más de 24 millones de euros), Empleo e Inserción Laboral (23,7 millones), Personas Sin Hogar (18,6 millones), Infancia (10,4 millones) e Inmigrantes (10 millones de euros).
Por debajo de los diez millones de euros de inversión anual, pero con un volumen de recursos y un número de personas atendidas muy importante, la Memoria 2008 de Cáritas da cuenta también de la importante actividad llevada a cabo en los capítulos de Familia, Mujer, Drogodependencias, Drogodependencias, Sida, Vivienda, Personas con Discapacidad, Juventud, Salud, Reclusos y Comunidad Gitana.
Si el volumen de recursos demandados a los distintos programas de Cáritas en el ámbito estatal dibujan un “mapa de situación” sobre quiénes son las personas y cuáles los problemas de exclusión más expuestos al impacto de la crisis, hay otros ámbitos del trabajo de la institución que, como destacó el presidente Rafael del Río, hablan a las claras cómo está siendo la generosa respuesta a esta grave coyuntura de la sociedad, tanto a través de los voluntarios como de los socios y donantes que colaboran a la actividad de Cáritas.
Sube el número de voluntarios y se mantiene la máxima austeridad
Un buen indicador de ese grado de compromiso y de generosidad queda recogido en el apartado dedicado al Voluntariado, que en 2008 suman un total 56.998 personas y suponen una esperanzadora subida, después de cinco años de estancamiento. En esa corriente de solidaridad participan también de manera esencial los 145.000 socios y donantes que sostienen una parte muy significativa de las acciones de Cáritas en toda España, así como la dedicación de los 4.621 trabajadores remunerados adscritos a los distintos programas, centros y servicios repartidos por todo el Estado.
Junto a la importancia del papel de los voluntarios en la respuesta a los efectos de la crisis, Rafael del Río subrayó el esfuerzo de austeridad que, un año más, ha realizado Cáritas para mantener en un porcentaje del 7,7 por ciento (apenas 8 céntimos de cada euro) los gastos destinados en 2008 al apartado de gestión y administración.
Asimismo, la procedencia de los recursos manejados por Cáritas mantiene un año más la tendencia de las últimas décadas, ya que en 2008, de cada 100 euros, casi 62 proceden de aportaciones privadas y otros 38 de subvenciones públicas.
Perfiles de las personas que demandan ayuda de urgencia
En el III Informe del Observatorio de la Realidad de Cáritas se ofrecen datos contrastados sobre el perfil de las personas que, a lo largo del primer semestre de 2009, han acudido a los servicios de Acogida de Cáritas para demandar ayuda urgente ante los efectos de la crisis y que, como indicó Ana Abril, revela la aparición de nuevas formas de pobreza. Como en los dos informes precedentes (octubre-diciembre de 2008 y junio de 2009) se confirma que mucha de la gente atendida acude por primera vez a Cáritas y otras muchas vuelven después de haber finalizado procesos de inserción social en el pasado.
Los principales perfiles sociodemográficos recogidos entre las distintas Cáritas Diocesanas del país indican que las personas atendidas son, en su mayoría y por este orden, jóvenes parados en busca de su primer empleo, desempleados mayores de 45 años, parados recientes procedentes de empleos de baja cualificación, familias jóvenes de cónyuges menores de 40 años con niños pequeños a su cargo, mujeres solas con cargas familiares, mujeres inmigrantes que han venido a España dentro de procesos de reagrupación familiar, mujeres mayores con pensiones de muy baja cuantía e inmigrantes en situación irregular.