Nuestra misión es encontrarte

Hoy nos regalas una nueva oportunidad
para dialogar contigo.

Ciudad Redonda. Un lugar para compartir lo que somos. Siempre es hora de renovar nuestra amistad:
de profundizarla,
de reestrenarla,
como si fuera la única vez que nuestros ojos
quedan sorprendidos por tu presencia,
fascinados por la luz de tu mirada.

Hubo una primera vez…
y cada día ¡sigue siendo la primer vez!
Porque tú, Jesús, "eres" la novedad de Dios.
Tú eres el Hombre Nuevo,
la Buena Nueva,
la Imagen Perfecta
-siempre idéntica pero nunca repetida-
del rostro del Padre.

Nuestra vocación última es contemplarte,
y escucharte;
nuestra única misión es encontrarte
y vivir contigo
en comunión con todos nuestros hermanos.

Si te descubrimos y alimentamos tu amistad,
poco a poco nos haremos semejantes a ti
y aprenderemos a morir en tu muerte
y a resucitar en tu resurrección.
Poco a poco seremos cristianos.
Amén.