¿Qué música escuchan los jóvenes?

¿Qué música escuchan los jóvenes?

   Ciudad Redonda. Un lugar para compartir lo que somos.
 Acabo de regresar , de Atenas desde donde he retransmitido el Festival de Eurovisión. Los ganadores son un grupo de heavy llamado Lordi. ¡Por primera vez heavy en Eurovisión! y al parecer han conseguido movilizar el voto joven en toda Europa. ¡Estoy impresionada!

    Lordi llegó al festival rodeado de polémica porque, después de seleccionarlos, los finlandeses se arrepintieron y algunos escribieron en los foros renegando del grupo, sintiéndose avergonzados por la imagen que daban de su país. Por el contrario, la crítica gubernamental y religiosa que padecieron parece haber movilizado a sus seguidores y a los jóvenes europeos en general. Estos días se hablaba de que el voto a Lordi fue un voto de protesta y hasta un voto antisistema. ¿Eurovisión no sólo es un muestrario geopolítico de Europa a través de sus votaciones sino también un catalizador de los antiglobalización? No creo que la cosa llegue a tanto, ni mucho menos, pero sólo el hecho de pensarlo y publicarlo indica que la música sigue teniendo esa capacidad "transgresora" que ha tenido siempre.

    Me preguntan qué escuchan los jóvenes de ahora. De todo.
Dicen las encuestas que los jóvenes de hoy son más pasotas, pero hay un sector, cada vez más amplio, de rebeldes, contestatarios, solidarios e inconformistas. La música está ahí para todos, desde la más comercial a la más minoritaria. Desde luego la música sigue siendo un elemento importantísimo en sus vidas. Cuando se habla de la crisis de la música se habla en realidad de la crisis del negocio de la música, de lo mal que les va ahora a las compañías discográficas, pero se sigue consumiendo música tanto o más que antes aunque de otra forma. Basta con ir en metro a una hora punta para ver la cantidad de gente que lleva un mp3, miles de canciones para acompañarlos durante todo el día. Lo que pasa es que a las compañías, a la Sociedad de Autores y a las autoridades competentes sólo les interesa el dinero que genera la música y no quieren saber nada más.

    El top manta está superado para los jóvenes porque pueden bajarse las canciones por Internet, más cómodo, barato y, sobre todo, mejor calidad. Sin embargo, el hecho de que el negocio esté disminuyendo hace que se descuiden aspectos importantísimos. Hay leyes surrealistas. Pongo dos ejemplos:

    Ciudad Redonda. Un lugar para compartir lo que somos.

1er ejemplo: Ahora muchos chicos jóvenes tienen un grupo. A veces esos grupos aficionados no solo no cobran sino que pierden dinero por actuar en un local ya que se les exige pagar a la Sociedad General de Autores, aunque las canciones sean suyas y no estén dados de alta en la SGAE.

    2º ejemplo: Con todo el tema de la prohibición de vender alcohol a los menores de edad, no se puede entrar con menores en un local de conciertos en el que se consuman bebidas alcohólicas, o sea, todos, aunque vayan acompañados de sus padres. Mi hijo pequeño, de diez años, no puede ir a conciertos, aunque es un gran aficionado a la música, porque no le dejan entrar conmigo a las salas, ni siquiera a Festivales al aire libre. Es decir, hasta los 18 años no se puede escuchar música en directo a no ser en el colegio o en el Teatro Real.

    En nuestro país hay cierta tendencia a considerar que solo hace música el que estudia en el conservatorio y se dedica a la música clásica, y así nos va. Seguimos siendo unos incultos musicales de tomo y lomo.

    A pesar de todo ¿qué escuchan los jóvenes? Creo que hay un gran eclecticismo y un afán de escuchar cosas nuevas y desde luego hay un nuevo vehículo para encontrarlas: ni radio, ni revistas, ni discográficas. Internet se está convirtiendo en el nuevo gurú. El otro día me decían que las tres canciones del verano son el Opá, la canción de Laura y Paquito el Chocolatero. Las dos primeras se han hecho famosas en toda España a través de la red y son a cual más horrible, pero ahí están, la tercera, un pasodoble con 70 años a sus espaldas, es la música de un anuncio de televisión.

    Parece que como no utilizan los canales tradicionales, los jóvenes no se enteran, pero se enteran de todo y además desde más pequeños. Es impresionante ir a conciertos de grupos que yo creo desconocidos y ver que están llenos a reventar. Desde luego las cosas están cambiando y cuanto antes nos demos cuenta mejor.

    La música sigue siendo el lenguaje del alma, como decía Platón. Tal vez a algunos padres y profesores les gustaría que ese lenguaje fuera más clásico, más Mozart y menos hip-hop pero es que, a lo mejor Mozart fue el hip-hop del XVIII y no podemos vivir todo el tiempo en el pasado por muy bonito que fuera. Por supuesto ser un genio es difícil. Mozart le escribió a su mujer "Hoy, por puro aburrimiento, he compuesto un aria para La Flauta mágica". A la mayoría de los músicos aficionados les cuesta sangre, sudor y lágrimas componer una canción y nunca trascenderán el tiempo como Wolfgang Amadeus, pero lo intentan, y otros no lo intentan pero viven con la música en la oreja todo el día y eso es estupendo: ¿o no?

LA MÚSICA QUE ME GUSTA


David Portos, 17 años
    Cuando me pregunto qué supone la música en mi vida lo simplifico de la siguiente manera: "Una forma de ver el mundo, sentir qué es lo que pasa en la vida y cómo me influye". Sin la música no podría vivir, no podría entender la vida y las cosas que me pasan.
    A mí me encanta la música rock, música con "dureza" y ritmos espectaculares. Es un estilo musical que critica los problemas del mundo y trata de buscar soluciones a conflictos que existen en la sociedad como el racismo, las guerras o ciertos asuntos sucios de organismos políticos. Me parece bien que haya gente que escuche todo tipo de música, pero, sí debo ser sincero, a mí el reg-gaeton y algunos estilos del pop no me gustan. Son puro consumismo, una máquina de editar álbumes sin sentido donde las letras de las canciones no dicen nada y se limitan a un estribillo absurdo que muchos tararean sin pensar si quiera lo que dice. Eso me parece mal, la gente qué no reflexiona sobre loCiudad Redonda. Un lugar para compartir lo que somos. que escucha y "traga" con lo que le pongan con tal de que tenga cierto ritmo. A quien me lea le recomendaría que escuchase a:
Avril Lavigne, chica rebelde del pop y no una mera chica-almanaque como Britney Spears o Cristina Aguilera; el grupo Slipknot, fantástico su vestuario, el ritmo fuerte y frenético de su música os hará vibrar y, por último y sabiendo que lo que voy a decir a muchos no os gustará, Marilyn Manson, la letra de su música es auténtica filosofía, que no os confunda su imagen gore y de ultratumba.

Bárbara Frade, 19 años
    La música es un ingrediente importante en mi vida. Es lo que me llena, me anima y me motiva. Cuando pongo un CD de música folk, rock o gothik-rock, estoy a gusto, puedo expresar mi estado de ánimo y manifestar lo que siento en cada momento.
Me encanta este tipo de música porque utiliza el violín y los instrumentos de viento produciendo un sonido puro donde destacan las voces, especialmente las femeninas.
Sé que muchos jóvenes, amigos y amigas mías, escuchan reggaeton pero a mí no me gusta nada. Me parece un estilo vulgar y carente de sentimiento.
    En cuanto al hip-hop y el rap, reconozco su preocupación por el ritmo pero descuidan demasiado la melodía y, por eso, tampoco me identifico con este género.
    Os recomendaría escuchar a Belén Arjona, su música es fresca y la letra de sus canciones extraordinaria. Como curiosidad, os invito a escuchar a Sarah Brightman, cantante de ópera que acaba de sacar dos discos fantásticos con canciones pop.
Como grupo, Héroes del Silencio, lo mejor que ha visto España en el panorama musical.

Adrián Trapiello, 16 años
    La música es ese curioso termómetro anímico que me permite pasar de la euforia al llanto que, aún en los momentos más difíciles, es capaz de relajarme y evadirme de mis problemas.
Para mí la música es un modo de protesta y reivindicación social. Sirve para muchos fines: bien para levantar conciencia ante injusticias y abusos sociales bien para embobarnos con mensajes "baratos". Por eso la importancia de la música como medio para entender nuestra cultura y averiguar quiénes somos. Creo que esta "asignatura", análisis de la vida a través de la música, tendría que estudiarse en el colegio.

    Ciudad Redonda. Un lugar para compartir lo que somos.
    Mi música favorita es el Rock, me encanta la música de los años 70. Chuck Berry, The Rolling Stone, Bob Dylan,… estos artistas no sólo dan un nuevo giro a la música sino que rompen moldes sociales. Sin embargo, estilos de música no evolucionados, como el creado por máquinas con ritmos repetitivos, no me gustan. El reggaeton, el tecno, el house,… me cuesta entenderlos como música y me sorprende que alguien compren un disco de reggaeton donde no existe creatividad musical y las letras de las canciones son auténticas barbaridades.
    Si tuviera que regalar un disco a quienes me están leyendo éste sería: Led Zeppelín, banda cuasiperfecta, es como una película de coral donde sus componentes se complementan de manera perfecta. Jimmy Page o Robert Plant también entrarían entre mis favoritos. Como bandas os recomendaría The Who, The Clash o Gun’s and Roses.
Por último, en una estantería especial, Bob Dylan, escuchar "Like a Rolling Stone" es un auténtico placer terrenal.

David Parrado, 17 años
    Para liberar tensiones, relajarme y olvidarme de todo, para eso me sirve la música. Además, me vale para expresar mis sentimientos a otras personas que, con palabras, me resulta imposible.
    Me encanta el trash metal, death metal, … todo lo relacionado con el heavy metal. La razón, es un estilo con mensaje, con intención, que pretende transmitir valores y que, a la vez, teCiudad Redonda. Un lugar para compartir lo que somos. permite descargar adrenalina.
    Ahora bien, como buen oyente de música, y respetando este arte como creo que lo hago, considero que no se puede despreciar ningún estilo, simplemente es cuestión de seleccionar aquello que más va contigo, que más te llena. Lo que sí recomendaría es que la gente escuchase de todo un poco, por lo menos al principio, y luego eligiese con criterio no porque salga más en la tele o lo pongan en la discoteca o aparezca tal o cual cara bonita. A mí escuchar otros estilos musicales me ha servido para valorar mucho más el que me gusta y darme cuenta de que mi elección es acertada.
    Si pasáis por una tienda de CDs os recomendaría que os paraseis en las estanterías donde ponga: Jimmy Hendrix, uno de los mejores guitarristas de su época. Metallica, por su sonido, su melodía, las letras de sus canciones. Por último Children of Bodom, una banda del año 2000 que suena realmente bien.

Inés Chouza, 15 años
    La mejor forma de expresar lo que siento es a través de la música. Para relajarme, soñar, aislarme de todo y de todos, estar conmigo misma, utilizo la música. Y cuando digo música, es en mayúscula, sin despreciar ningún estilo. Por ejemplo, me gusta el pop-rock cuando estoy alegre o quiero divertirme y, sin embargo, escucho música celta o música clásica cuando quiero descansar, estar más de relax o trabajar.
    Creo que todo tipo de música tiene un significado y de lo que se trata es de apreciar las cosas buenas que hay en cada género musical, no de imponer uno al resto creyendo que todo lo demás es malo o no sirve para nada.
    Sin duda, la música supone mucho en mi vida pues creo que me identifica, me ayuda a crecer, a formar mi personalidad y a que mis amigos me conozcan tal y como soy.
    Mis grupos o solistas preferidos son: Carlos Núñez (me identifico mucho con su música), Shakira (me encanta el ritmo de sus canciones), The Beatles y The Rolling Stones.B