Un pajarillo me dijo un día: He volado buscando las alas que me hacen volar y la fuerza que me mueve, y no la encuentro. Y yo le respondí: Hermano mío, también el hombre anda buscando su camino y la fuerza que lo hace andar y no se da cuenta que es "El Mismo". Y una palmera que nos escuchaba, dijo: Dejaros de filosofar y tomad mi ejemplo. Cada ser es lo que da. MIRAD LO QUE DAIS Y VEREIS LO QUE SOIS. Y después miré hacia arriba y ví que muchos pajarillos dormían en su seno.
La Presentación de la Bienaventurada Virgen María
Lc 19,41-44. ¡Si reconocieras lo que conduce a la paz!