Más allá de agua, higiene, calor y alimento, el ser humano precisa del contacto con los otros para crecer, desarrollarse y sobrevivir. Los estímulos positivos o negativos que recibimos de los demás -llamémosles ‘caricias’- son determinantes en nuestra evo
Autor
Álex Rovira Celma. En El País Semanal
Se necesitan caricias
Más allá de agua, higiene, calor y alimento, el ser humano precisa del contacto con los otros para crecer, desarrollarse y sobrevivir. Los estímulos positivos o negativos que recibimos de los demás -llamémosles ‘caricias’- son determinantes en nuestra evo
San Juan Bosco, presbítero
Mc 4,26-34. Echa simiente, duerme, y la semilla va creciendo sin que él sepa cómo
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