Somos hijos de nuestros padres y de nuestra tierra. Por ejemplo, a un israelita siempre le acompañarán los recuerdos ancestrales de Egipto. Si habla de su Dios, inmediatamente añadirá: «Te sacó de Egipto- (Dt 5,6; Ex 20,2).

Somos hijos de nuestros padres y de nuestra tierra. Por ejemplo, a un israelita siempre le acompañarán los recuerdos ancestrales de Egipto. Si habla de su Dios, inmediatamente añadirá: «Te sacó de Egipto- (Dt 5,6; Ex 20,2).
La historia bíblica destaca el protagonismo de personas mayores. Tienen la sabiduría. Son testigos de la memoria del pueblo.
Somos hijos de nuestros padres y de nuestra tierra. Por ejemplo, a un israelita siempre le acompañarán los recuerdos ancestrales de Egipto. Si habla de su Dios, inmediatamente añadirá: «Te sacó de Egipto- (Dt 5,6; Ex 20,2).
La historia bíblica destaca el protagonismo de personas mayores. Tienen la sabiduría. Son testigos de la memoria del pueblo.