‘Sólo hay un camino para identificarse con el pensamiento de Dios: la meditación diaria de la Biblia’

‘Sólo hay un camino para identificarse con el pensamiento de Dios: la meditación diaria de la Biblia’
Ahora vamos a rezar. Cada uno de vosotros hará una oración que tenga como máximo una palabra.
Hubo un hombre que no sabía odiar. Se dedicaba a hacer el bien a todos.
El pequeño ciempiés sintió que debía lanzarse a caminar, y preguntó inquieto a su madre: -Para andar, ¿qué pies debo mover primero?
En cierta ocasión un joven novicio preguntó al Abad si había posibilidad de conocer a Jesucristo por dentro. El Abad se limitó a abrir la Biblia delante de él.
Para recibir la Palabra de Dios hay que escucharla. Y escuchar no es lo mismo que oír, ni siquiera, que oír con atención, es mucho más.
Sólo el Espíritu puede crear y renovar la faz de la tierra, pero tú puedes liberar y acelerar esa acción con tu fidelidad de cada día.
‘Sólo hay un camino para identificarse con el pensamiento de Dios: la meditación diaria de la Biblia’
Ahora vamos a rezar. Cada uno de vosotros hará una oración que tenga como máximo una palabra.
Hubo un hombre que no sabía odiar. Se dedicaba a hacer el bien a todos.
El pequeño ciempiés sintió que debía lanzarse a caminar, y preguntó inquieto a su madre: -Para andar, ¿qué pies debo mover primero?