Autor

Gonzalo Fernandez Sanz cmf

Marta

Marta

«Tampoco es un crimen, chica. Acabas de fregar, barres la cocina, te calientas un poco de café y te sientas un ratito a ver la tele. Si no, dime tú qué tiempo le queda a una. Luego, en seguida vienen los niños y ya me dirás»…

Samuel

Samuel

Se puso el pendiente en la oreja porque quiso, por romper su imagen de chico bueno. Estaba harto de que todo el mundo le dijera que daba gusto un tipo como él en los tiempos que corren…

Rut

Rut

Noemí, su marido y sus dos hijos habían emigrado a Inglaterra a principios de los 60. Con lo que ganaban en las faenas del campo no tenían más que para subsistir…

David

David

A veces pienso que soy más famoso de lo que merezco. Y no sé quién ha movido los hilos de mi vida. Las broncas me han llovido a mí, pero creo que el guionista de la película has sido tú, Señor. Soy un mar de contradicciones…

Rajab

Rajab

Aunque eran un poco fuertes, a ella le gustaba leerlos cuando se tiraba de la cama a mediodía. Los tenía escritos en un papel de cuaderno clavado con chinchetas verdes encima de la cama…

Jonás

Jonás

Se llama Jonás, pero bien podría llamarse Antonio, Paco o Jorge. No llega a los cincuenta. Ha tenido tiempo para casi todo…

Isaías

Isaías

Cada vez que iba a renovar el documento de identidad se repetía la misma broma: «Con esa barba y ese nombre parece usted un profeta». A Isaías estas asociaciones le traían al fresco…

Eleazar

Eleazar

Su nuera le había dicho que la operación de cataratas entraba en la Seguridad Social, pero, la verdad, no tenía muchas ganas de volver a la clínica. Además, no era un asunto de vida o muerte…

Pablo

Han retrasado el vuelo y nadie ha dado ninguna explicación. Pablo mira los paneles electrónicos cada minuto mientras se pasea nervioso por el amplio hall del aeropuerto…

Marta

Marta

«Tampoco es un crimen, chica. Acabas de fregar, barres la cocina, te calientas un poco de café y te sientas un ratito a ver la tele. Si no, dime tú qué tiempo le queda a una. Luego, en seguida vienen los niños y ya me dirás»…

Samuel

Samuel

Se puso el pendiente en la oreja porque quiso, por romper su imagen de chico bueno. Estaba harto de que todo el mundo le dijera que daba gusto un tipo como él en los tiempos que corren…

¡No hay eventos!