Dios está en la cotidianidad de mi vida. No me espera a una hora fija, sino que simplemente está en mi y en todo lo que me rodea haciéndose notar más o menos.
Autor
María Teresa Ozores
Siento que Dios está en la cotidianidad de mi vida.
Dios está en la cotidianidad de mi vida. No me espera a una hora fija, sino que simplemente está en mi y en todo lo que me rodea haciéndose notar más o menos.