Celebrada la fiesta del cuerpo y la sangre de Cristo, algún descreído podría interpretar con la devoción al corazón de Jesús que en el cristianismo abundan y redundan fetiches religiosos.

Celebrada la fiesta del cuerpo y la sangre de Cristo, algún descreído podría interpretar con la devoción al corazón de Jesús que en el cristianismo abundan y redundan fetiches religiosos.
Celebrada la fiesta del cuerpo y la sangre de Cristo, algún descreído podría interpretar con la devoción al corazón de Jesús que en el cristianismo abundan y redundan fetiches religiosos.