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Hacerse como niños, acoger a los niños

Hacerse como niños, acoger a los niños

De la proximidad existencial al Jesús niño y al empequeñecimiento de Dios, brotará amor a la niñez y a cada niño. Un tal amor será anticipo de aquella felicidad en la que entró por siempre Jesucristo. El mismo nos lo sigue recordando: «Quien acoge a un ni

¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?

¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?

Es una pregunta de rigurosa seriedad. Tras ella, nada volverá a ser igual. Donde los actores decían «comprender/no comprender», «ver/no ver» ahora van a empezar a decir «cargar con la cruz», «subir a Jerusalén».

DIOS, PADRE DE LA ALEGRÍA

DIOS, PADRE DE LA ALEGRÍA

¿Eres feliz? ¿Qué necesitas para ser feliz? ¿Que te impide la felicidad? ¿Cómo se puede vivir con alegría ante la calamidad y miseria que viven millones de seres humanos? Nietzsche decía que para que él pudiera creer en el Redentor de los cristianos estos tendrían que cantar otras canciones y sus discípulos parecer más redimidos (más alegres). ¿Son nuestras reuniones celebraciones, asambleas… alegres?

DIOS PADRE Y MADRE

DIOS PADRE Y MADRE

«No es cuestión modas feministas (aunque las teólogas feministas han ayudado). No es, sólo, gracias al libro de Leonardo Boff «El rostro materno de Dios». En la Sagrada Escritura Dios se nos ha revelado con símbolos masculinos y femeninos, padre-madre.

El silencio del Padre

El silencio del Padre

«Padrenuestro del año: a nuestro Dios le han nombrado «padre del año» por lo que padecemos una saturación… Es bueno que oremos pidiéndole silencio, el necesario para tener una buena relación con él, de amor y respeto.

Quien me ve a mí, ve al Padre

Quien me ve a mí, ve al Padre

Ea, hombrecillo, deja un momento tus ocupaciones habituales. Entra un instante en ti mismo, lejos del tumulto de tus pensamientos. Arroja fuera de ti las preocupaciones agobiantes. Aparta de ti tus inquietudes trabajosas. Dedícate algún rato a Dios y desc

Hacerse como niños, acoger a los niños

Hacerse como niños, acoger a los niños

De la proximidad existencial al Jesús niño y al empequeñecimiento de Dios, brotará amor a la niñez y a cada niño. Un tal amor será anticipo de aquella felicidad en la que entró por siempre Jesucristo. El mismo nos lo sigue recordando: «Quien acoge a un ni

¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?

¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?

Es una pregunta de rigurosa seriedad. Tras ella, nada volverá a ser igual. Donde los actores decían «comprender/no comprender», «ver/no ver» ahora van a empezar a decir «cargar con la cruz», «subir a Jerusalén».

DIOS, PADRE DE LA ALEGRÍA

DIOS, PADRE DE LA ALEGRÍA

¿Eres feliz? ¿Qué necesitas para ser feliz? ¿Que te impide la felicidad? ¿Cómo se puede vivir con alegría ante la calamidad y miseria que viven millones de seres humanos? Nietzsche decía que para que él pudiera creer en el Redentor de los cristianos estos tendrían que cantar otras canciones y sus discípulos parecer más redimidos (más alegres). ¿Son nuestras reuniones celebraciones, asambleas… alegres?

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