Comentario al Evangelio de 3 de junio de 2024
Jesús cita una frase de las Escrituras: “la piedra que despreciaron los constructores es ahora la piedra principal” Aquellos constructores sabían lo importante que era escoger bien las piedras principales para levantar la casa y sostener la casa, seleccionan la mejores
Jesús, piedra angular será despreciado por las autoridades que, al escucharle, se daban cuenta de que la comparación que hacía Jesús iba dirigía a ellos, que planeaban la muerte, pero no podían arrestarlo por temor a la gente.
Así vemos que el corazón de la gente sencilla suele estar más abierto a las novedades de Dios, pero cuando tenemos algún poder, sea económico, intelectual, político, religioso, nos aferramos a esa seguridad falsa, hasta el punto de que ya no recibimos con apertura los mensajes de Dios. Pretender construir comunidades cristianas con otras piedras es un error, un pecado. ¿Sabremos hoy ser instrumentos de Cristo, servidores de su viña, no la nuestra?
Cordialmente
Salvador León, cmf