Comentario al Evangelio del lunes, 25 de enero de 2021
Javier Goñi, cmf
Hermanos y hermanas:
Este lunes, coincidiendo con la fiesta de la conversión de San Pablo, termina el octavario de oración por la unidad de los cristianos. En este contexto, escuchar la llamada de Jesús a ir al mundo entero y proclamar el Evangelio, me ha llevado a pensar en aquellos que hoy día la están escuchando y están respondiendo. La llamada es universal, a todo cristiano, laicos, seglares y sacerdotes, sí, y también a los cristianos de todas las Iglesias, no sólo la católica. No solo nosotros anunciamos la buena nueva a los pobres: en todas las Iglesias cristianas lo hacen, y a veces tan bien o mejor que nosotros. Conozco a dos grandes evangelizadores de iglesias evangélicas, pastor y una pastora, que anuncian la Buena Nueva a los que más sufren en realidades sociales muy difíciles. Cuánto ganaríamos si empezáramos a reconocernos como hermanos, a aceptarnos respetando nuestras diferencias, y a colaborar en la misión de anunciar y construir el Reino. Gracias a Dios, algunos pasos ya se han ido dando.
San Pablo respondió a la llamada de Jesús con un cambio radical de vida, pasando de ser perseguidor de los cristianos a anunciar a Cristo a todos en las diversas culturas con las que se encontró. Es el encuentro con el Señor el que le cambió la vida; también es así en nuestra experiencia como cristianos. Eso sí, de maneras diferentes: ese encuentro puede ser repentino o progresivo, puede ser desde fuera de la fe, o ya perteneciendo a diversas iglesias cristianas. Pero la conversión, la escucha de la llamada y el compromiso evangelizador surgen siempre del encuentro personal con Jesús. No hay otro camino: en la oración personal y comunitaria, en la escucha de la Palabra, en los pobres, en los sacramentos que cada Iglesia reconozca…
Necesitamos encontrarnos con Jesús. Todo lo nuevo nace de ese encuentro. La novedad del Reino, y con ella, la novedad de la unidad reconstruida de los cristianos y la novedad de una humanidad justa, pacífica, fraterna y respetuosa con la naturaleza.
Javier Goñi (fjgoni@hotmail.com)