Comentario al Evangelio del miércoles, 11 de marzo de 2020
CR
La liturgia selecciona los textos bíblicos que leemos cada día en la celebración de la Eucaristía con la intención de que pongamos nuestra atención en los aspectos fundamentales de nuestra fe. Son textos que en este camino cuaresmal nos ayudan a entender y vivir mejor el Misterio de la Pascua.
En ese contexto de la Pasión y Muerte del Señor hay que entender la escena de los hermanos Zebedeo que buscan privilegios en el seguimiento de Jesús. La meta del cristiano es servir y dar la vida siendo el último, como hizo su Maestro y Señor.
Estamos ante el tercer anuncio de la Pasión. Desde aquí el evangelio queda totalmente orientado hacia la Pascua de Jesús y su victoria sobre la muerte.
Este anuncio introduce la enseñanza de Jesús acerca del servicio. La actitud de Jesús caminando hacia Jerusalén para entregar su vida contrasta con el egoísmo de los dos hermanos que buscan los puestos de honor. Los demás discípulos sienten envidia ante la petición, por eso se enfadan. No han entendido aún lo que quiere decirles Jesús con su servicio a los más pequeños y su entrega hasta la cruz.
Uno se queda admirado de la actualidad de la palabra de Dios. Si lo miramos bien, a todos los niveles de la sociedad y de la vida de las personas por más religiosas y creyentes que seamos, nos acecha un deseo mal disimulado de ser más que los demás y de que los demás se pongan a nuestro servicio.