Comentario al Evangelio del miércoles, 5 de octubre de 2022
Paulson Veliyannoor, CMF
Sobre el Padre Nuestro, escuchemos unas palabras del Catecismo de la Iglesia Católica (nº 2766):
"Jesús no nos da una fórmula para repetir mecánicamente. Como en toda oración vocal, es a través de la Palabra de Dios que el Espíritu Santo enseña a los hijos de Dios a orar a su Padre. Jesús no sólo nos da las palabras de nuestra oración filial; al mismo tiempo nos da el Espíritu por el que estas palabras se convierten en nosotros en 'espíritu y vida'. Más aún, la prueba y la posibilidad de nuestra oración filial es que el Padre 'envió el Espíritu de su Hijo a nuestros corazones, clamando: ¡Abba! Padre". Puesto que nuestra oración expone nuestros deseos ante Dios, es de nuevo el Padre, 'el que escudriña los corazones de los hombres', el que 'sabe cuál es la mente del Espíritu, porque el Espíritu intercede por los santos según la voluntad de Dios'. La oración al Padre Nuestro se inserta en la misteriosa misión del Hijo y del Espíritu".