Liturgia Viva – Lunes de la XXI Semana del Tiempo Ordinario
SANTA MÓNICA
Introducción.
Mónica, convencida cristiana, estaba casada con un marido de genio demasiado vivo; mujeriego también. Agustín pertenecía a la secta de los Maniqueos y su conducta moral le causó a su madre mucha ansiedad y vergüenza. Sin embargo Mónica finalmente pudo vencerle para la fe con sus oraciones y penitencia — y ¡qué hombre y qué clase de cristiano Agustín llegó a ser!
Las lágrimas de su madre le habían llevado a vivir en Cristo. De esta manera podemos decir que ella fue dos veces madre. Su vida fue como cantidad de mujeres -pruebas en el matrimonio, preocupación e intranquilidad con los hijos difíciles. Pero ella sabía que la fe en Cristo lo hace todo posible.
Oración Colecta
Dar una vida humana a sus hijos
es la gran misión que confías a las madres.
Te damos gracias hoy por Santa Mónica
que te suplicó incesantemente por su hijo Agustín
para que pudiera encontrar a Jesús en su vida.
Concede a todos los padres
que sepan ayudar a su hijos a vivir y a crecer
en la vida y en el futuro eterno
de Jesucristo nuestro Señor.
Oración sobre las Ofrendas
Que este pan y vino sean signos
de que con tu Hijo Jesucristo
nos preocupamos de tu Reino entre el pueblo.
Ayúdanos por medio de tu Hijo
a dirigirnos mutuamente
en el camino hacia ti.
Que él viva en todos nosotros
por que él es nuestro Señor
por los siglos de los siglos.
Oración después de la Comunión
Te damos gracias por Jesucristo
y por los muchos hombres y mujeres,
como Santa Mónica,
para quienes él significó tanto
que se dedicaron generosamente a sus prójimos
a causa de Jesús.
Que ellas nos inspiren hoy
para preocuparnos de los que nos rodean
Ayúdanos a creer lo bastante firmemente
en el misterio de la resurrección de tu Hijo
para alzarnos por encima de nosotros mismos,
gente sin importancia,
y para ayudar a otros a superar
sus miedos y sus servidumbres
por Jesucristo nuestro Señor.