Liturgia viva del V Domingo del Tiempo Ordinario
Quinto Domingo del Tiempo Ordinario (A)
Luz que debería iluminar: Sal que debería dar sabor
Saludo
Que el Señor Jesús, luz del mundo, que nos reune.
Haga nuestros rostros reflejen su luz
y que siempre este con vosotros.
R/ Y con tu espíritu.
Introducción del celebrante
Lo que nos sorprende del mensaje de las lecturas de hoy es cuánto confía Cristo en nosotros, incluso más que nosotros mismos. Él nos confía la misión de ser luz que ilumina el mundo, sal que preserva y da sabor al mundo con el aroma del evangelio, la misión de ser una ciudad de luz que atraiga a todos a Dios. ¡Qué responsabilidad! Hoy, pidamos a Jesús que encienda su luz en nosotros.
Acto penitencial
Que poco ha brillado la luz de Cristo en nuestras vidas.
Pidamos perdón al Señor. (PAUSA)
Señor Jesús, que eres la luz verdadera que ilumina el mundo. Señor ten piedad.
Cristo Jesús que dijiste de tí mismo: “Yo soy la luz del mundo, el que me siga tendrá la luz de la vida. Cristo, ten piedad.
Señor Jesús, que nos dices: Tú eres la luz del mundo. Tu luz debe brillas para toda la humanidad. Señor, ten piedad.
Señor, deja que la luz de tu misericordia se lleve la oscuridad de nuestro pecado. Danos a luz de la vida y condúcenos a la vida eterna.
Amen.
Oración Colecta
Oremos para que hagamos las buenas obras que lleven a la humanidad hacia Dios. (PAUSA)
Padre amoroso,
somos importantes para tí,
porque nos sigues confiando la misión
de dar a conocer tu nombre y tu amor.
Fortalécenos en nuestras debilidades,
que saboreemos el mensaje del evangelio,
que siguiendo las huellas de tu Hijo Jesús
llevemos tu luz y tu sabor al mundo
y llevemos adelante esta tarea con alegría.
Te lo pedimos por el mismo Jesucristo, nuestro Señor.
AMEN
Liturgia de la Palabra
Introducción a la Primera Lectura:
Que tu luz ilumine a todas la gentes.
El profeta nos dice hoy: Dios estará cerca de tí y tu iluminarás con su luz si estás cerca de los necesitados.
Introducción a la Segunda Lectura: 1 Cor 2:1-5
Doy testimonio de Cristo Crusificado
San Pablo reflexiona sobre su misión: no es filosofando o haciendo discursos como predico a Cristo sino dando testimonio del Señor crucificado.
Introducción al Evangelio: Mateo 5:13-16
La sal y la luz del mundo
De acuerdo con Jesús nuestra tarea en el mundo es vivir en coherencia con el Evangelio de manera que la luz de Dios ilumine al mundo.
Peticiones
Pidamos al Padre la luz que verdaderamente nos convirtamos en la sal y la luz del mundo.
Respondemos diciendo: R/Señor, que tu luz nos ilumine.
– Para que haya más amor en la tierra, Señor, te pedimos que dispongas a la gente para ser más comprensiva y amistosa con los demás y compartan con mayor facilidad con los necesitados, oremos.
R/ Señor, que tu luz brille en nosotros
– Para que haya más justicia en la tierra, dispón a los governantes y responsables públicos para hacer sitio entre sus prioridades y presupuestos a los empobrecidos y parados. Oremos…
– Para que haya más paz en la Tierra, dispón a todas las naciones a poner fin a las palabras de odio y de amenaza de venganza. Oremos….
– Para que haya más alegría en la tierra, dispón a aquellos que siguen a tu Hijo mostrar simpatía y afecto los unos a los otros, para que sean fieles a sus amigos y se preocupen de sus comunidades. Oremos…
– Para que haya más fe en la tierra, dispón a todos tus hijos e hijas a vivir como hijos de la luz ante tí y a la vista de la gente. Oremos.
Señor Dios, oramos para que tu luz ilumine a toda la tierra. A pesar de que somos limitados, permite que nuestras palabras y acciones sean reflejo de la luz de tu amor, en el nombre de Jesús el Señor. Amen.
Oración sobre las ofrendas
Dios y Padre nuestro,
tu Hijo Jesús se nos entregó por completo
en el pan y en el vino
como comida sabrosa y vino de alegría.
Por el poder que ellos tienen
ayudanos a ser testigos
de que la vida tiene sentido y merece la pena:
Haz que seamos personas para los demás como Jesús,
que nuestro sentido de la justicia y del compartir
de sabor a nuestra vida y al mundo
y a todos los que nos rodean,
para que vean que tu Hijo Jesús está con nosotros,
ahora y por siempre. Amen.
Introducción a la Plegaria Eucarística
Let us give thanks to the Father in heaven that he has let the light of Jesus shine in us so that we too can become lights to the people around us.
Demos gracias al Padre del Cielo porque ha hecho que la luz de Jesús nos ilumine nuestros corazones de manera que también nosotros podamos ser luz para la gente con la que vivimos.
Líbranos Señor
Libranos Señor de todo mal
y liberanos de todo temor
haciendo que la luz de tu Hijo brille
en la oscuridad de este mundo.
Aunque tenue y vacilante,
que nuestras tímidas luces iluminen
hasta que nos encontremos para siempre
ante la luz verdadera en la tierra y en el cielo,
por Jesucristo nuestro Señor y Salvador.
R/ Por Cristo, con Él…
Invitación a la comunión
Este es Jesús el Señor.
El dijo: Yo soy la luz del mundo.
El nos dice a cada uno de nosotros:
Tu eres la sal que debería dar sabor
a la vida de la gente de tu entorno.
Tú eres la luz del mundo
que no debería pernamecer escondida.
Estamos felices porque el Señor confía en nosotros
y nos invita a recibirle.
R/ Señor, yo no soy digno….
Oración después de la comunión
Señor Dios
nos has dado la sal y la luz
de tu Palabra y de tu Pan de Vida.
Que hagan de nuestra comunidad cristiana
una ciudad que ilumina en lo alto de una montaña
para ser testigos de tu integrodad,
de tu amor y justicia en este mundo.
Acepta nuestro humilde agradecimiento
por llamarnos a pronunciar tu nombre
y sostennos por el poder
del que es la luz del mundo,
jesucristo nuestro Señor.
R/ Amen.
Bendición
Que nuestro amor sea como la sal
que da sabor a la vida y la da sentido.
Que nuestra vida Cristiana sea una luz
para todos los que viven en la oscuridad.
Que nuestra comunidades cristianas
sean como ciudades iluminadas para ser vistas desde lejos
como signos de que Dios está con su pueblo.
Y que Dios os bendiga para su misión:
el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
R/ Amen
Id en paz y dejad que la luz de Cristo ilumine
a todos los que viven con vosotros.
R/ Demos gracias a Dios…