Liturgia Viva del Viernes de la XXIX Semana del Tiempo Ordinario
LOS SIGNOS DE LOS TIEMPOS
( Año II. Ef 4,1-6; Lc 12,54-59)
Introducción
Año II. La carta a los Efesios insiste en la unidad. Todo en nuestra fe es una llamada a la unidad en Cristo, ya que tenemos un bautismo, una Iglesia, un Espíritu, y un Padre de todos.
Evangelio. En su introducción, la Constitución del Vaticano II sobre la Iglesia en el Mundo de Hoy dice: “Es deber permanente de la Iglesia escrutar a fondo los signos de los tiempos e interpretarlos a la luz del evangelio, de forma que, acomodándose a cada generación, pueda la Iglesia responder a los perennes interrogantes de la humanidad sobre el sentido de la vida presente y de la vida futura, y sobre la mutua relación de ambas.” Por “signos de los tiempos” queremos significar corrientes de pensamiento y actitudes ante los acontecimientos, aspiraciones, problemas, movimientos de la humanidad, y semejantes. Pensemos en los hippis, el movimiento de Jesús, Pentecostalismo, la liberación de la mujer, dl fuerte anhelo de liberación, la rebelión de muchos jóvenes contra el consumismo y la hipocresía… ¿Podemos descubrir puntos de contacto y de apertura a los valores del evangelio?
Oración Colecta
Señor Dios nuestro:
Mientras el mundo de hoy tiene hambre
de justicia, de verdad y de valores espirituales,
quizá disfrazados o distorsionados
en una forma difícil de reconocerlos,
abre nuestros ojos, y danos
tu espíritu de sabiduría y discernimiento.
Así aprenderemos a comprender este mismo mundo,
a sentirnos como en casa con él
y a descubrir las sendas y los pasadizos
que nos pudieran llevar
a todos nosotros hacia ti,
por Jesucristo nuestro Señor.
Intenciones
- Señor, que la Iglesia de hoy sepa proclamar el evangelio a la gente de hoy en un lenguaje de hoy, te rogamos;
R/ Señor, escúchanos. - Señor, que los ministros consagrados de la Iglesia conozcan bien y se familiaricen con las necesidades y aspiraciones del mundo y de la gente de hoy, te rogamos:
R/ Señor, escúchanos. - Señor, haznos capaces de transformar un mundo de injusticia en un mundo de integridad, un mundo frío e indiferente en un mundo cálido de amor y misericordia, te rogamos:
R/ Señor, escúchanos.
Oración sobre las Ofrendas
Señor Dios nuestro:
Estos dones de pan y vino que te ofrecemos
hablan de vida y de atención,
de crecimiento y de participación.
Que hablen también a nuestros corazones
del amor oblativo de Jesús tu Hijo.
para que nosotros también
nos entreguemos generosamente
al crecimiento de su reino.
Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.
Oración después de la Comunión
Señor Dios nuestro:
Tú nos has llamado de nuevo
por medio del cuerpo eucarístico
de tu Hijo Jesús
para hacer el cuerpo místico de la Iglesia
cada vez más el signo vivo de tu presencia
y de tu acción en este mundo.
Haznos también receptivos
de todo lo bueno que hay en este mundo.
Ayúdanos a dialogar con nuestro tiempo
y con la gente de hoy,
para que este nuestro mundo sea tuyo
y tú seas nuestro Dios y Señor
por los siglos de los siglos.
Bendición
Hermanos: Si queremos ser gente que vive en nuestro tiempo, tenemos que estar con los ojos abiertos a todo lo que sucede en el mundo a nuestro alrededor. “Nadie es una isla”. Nadie debiera vivir en un mundo aparte. Esta actitud nos abrirá los ojos también para comprender mejor nuestra fe.
Que la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo
descienda sobre nosotros y permanezca para siempre.