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La Audacia con Dios

La Audacia con Dios

Hace algunos años, en un taller práctico, una mujer compartió esta historia.  Tenía un hijo de seis años de edad, a quien había tratado de instruir concienzudamente en la oración.

Reconsiderando – Las Directrices para un Largo Recorrido

Reconsiderando – Las Directrices para un Largo Recorrido

Hace veinticinco años, escribí una columna titulada Directrices para un largo recorrido. Reconsiderándolas recientemente, me sentí reconfortado porque mis principios no han cambiado en el último cuarto de siglo, sólo han adquirido más matices. 

Una llamada a defendernos menos

Una llamada a defendernos menos

Hoy en día entre muchos de nosotros, los fieles, existe una creciente tendencia a defendernos a nosotros mismos en lugar de arriesgarnos a ser crucificados por el mundo. Tenemos buena intención al hacerlo. Sin embargo, a pesar de esa buena intención, nuestras acciones son opuestas a las de Jesús.

Odres Pétreos y Recipientes más Blandos

Odres Pétreos y Recipientes más Blandos

Moralismos amargados, no importa cuán válida es la indignación que lo  inflama, adopta muchas formas y se reconoce siempre por su falta de calidez y su incapacidad para bendecir a los demás.

Luchando con la secularidad

Luchando con la secularidad

Como un hijo adulto de Rene Descartes, respiro en la secularidad, un aire muy mezclado, puro y contaminado, y me encuentro dividido entre la esperanza y el miedo, cómodo y, sin embargo, inquieto, defendiendo la secularidad aun cuando yo mismo la crítico.

El Siete Número de la Suerte

El Siete Número de la Suerte

De la Biblia a los casinos, el siete es a menudo considerado un número mágico, perfecto, y de la suerte. Jesús nos dijo que perdonáramos a aquellos que nos hacen daño setenta veces siete veces. Es evidente que se refería en el sentido de lo infinito.

Una camisa de fuego

Una camisa de fuego

Dicen que el libro que más necesitas leer te encuentra cuando más necesitas leerlo. He tenido esta experiencia muchas veces, últimamente con el libro de Heather King Camisa de fuego: Un año con santa Teresa de Lisieux.

El beso de Dios en el alma

El beso de Dios en el alma

¿Cuál es la verdadera raíz de la soledad humana? ¿Un defecto en nuestro modo de ser? ¿La insuficiencia y el pecado? ¿O dice todo la famosa frase de san Agustín: Nos has hecho para ti, Señor, y nuestros corazones están inquietos hasta que descansen en ti?

Inclinar y levantar nuestras cabezas

Inclinar y levantar nuestras cabezas

Al final de cada liturgia católica romana, se invita al pueblo a recibir una bendición. Esa invitación es expresada con estas palabras: Inclinad vuestras cabezas e implorad la bendición de Dios. La idea existente tras eso, obviamente, es que una bendición sólo puede serrecibida verdaderamente en reverencia, en humildad, con la cabeza inclinada, y con el orgullo y la arrogancia subyugados y silenciosos.

Siempre yendo delante de nuestras almas

Siempre yendo delante de nuestras almas

En su libro El Dios Instinct, Tom Stella cuenta esta historia: Unos hombres que se ganaban la vida como mozos de servicio fueron alquilados un día para portar un gran cargamento de materiales para un grupo en un safari. Sus cargamentos eran inusitadamente pesados, y la incursión a través de la jungla se realizaba por un escabroso sendero.

Sólo en el silencio

Sólo en el silencio

La escritora espiritual belga, Bieke Vandekerckhove, aprendió lo que sabe honestamente. No aprendió de un libro o de el buen ejemplo de otros. Sino que aprendió  a través del crisol de un sufrimiento único, al ser golpeada a la tierna edad de 19 años con una enfermedad terminal que vaticinaba no solo una muerte prematura sino también la completa quiebra y humillación de su cuerpo camino de la muerte.