Cosas simples, pero maravillosas
No estamos solos, sino que formamos parte de una gran familia: la familia de los hijos de Dios.
Capítulo II : Tierra de calvarios
Enfermar es peligroso y poder salir de una enfermedad es un lujo que no todos pueden alcanzar. Estos serán algunos de los calvarios que iré desgranando de una manera generalizada.
LA FAMILIA ES UNA CÁTEDRA
Cuando pinto un pájaro -decía un pintor- no me enredo en los detalles de las alas, sino que pinto el vuelo. Y Bergson nos advierte que el fuego que está en el centro de la tierra no se manifiesta más que en la cumbre de los volcanes.
¿COMO PUEDEN AYUDAR LOS LAICOS A LOS SACERDOTES?
Se impone abrir caminos a una nueva relación en la que los laicos no sean los ayudantes de campo de los sacerdotes, sino donde todos, laicos y sacerdotes, colaboren como iguales en la construcción de una iglesia que es por igual de todos. Sacerdotes y lai
EL VERDADERO PROFETA: UN HOMBRE ENTRE DOS FUEGOS
El profeta no es, propiamente, un adivino, ni un hombre que predice el futuro, que anuncia lo que va a suceder. Es éste un aspecto secundario de la vocación y de la misión profética. Profeta, en sentido riguroso, es el que habla en nombre y en lugar de ot
Capítulo I: Un tiempo después
Flor sin defensa, es la respuesta a unas llamadas y a unos sentimientos que se fueron avivando en la relación y en la convivencia con toda una diócesis hondureña que he vuelto a visitar después de tres años con el propósito de organizar una Misión Popular
Fidelizar
Los que empiezan una relación les asusta la posible monotonía, no se pueden imaginar una vida vinculada y limitada.
8 ‘síes’ y 8 ‘noes’ para seguir soñando
Algunas reflexiones sobre lo que debe y lo que no debe ser la pastoral vocacional.
Una mirada esperanzada (I)
A modo de carta quiero comenzar estos nuevos relatos nacidos de la experiencia de otra misión por tierras hondureñas.
Del enamoramiento al amor, un largo camino
La aventura del matrimonio puede vivirse como un largo camino en pareja en la que cada paso es diferente y nos descubre un nuevo paisaje hasta llegar a la cumbre.
El trabajo, ¿qué hombre prepara?
El trabajo puede fácilmente ser una expresión objetiva y elevada de la caridad fraterna puesto que «cumple el deber y el derecho de procurar para sí y los suyos la necesaria sustentación y se hace elemento útil a la sociedad» (Pío XII)