Santificado sea tu nombre
En esta entrega del Padre Nuestro se hace especial hincapié en el nombre de Dios y en su significado.
Madre de Dios del metropolita Pedro (Petrovskaia)
Según las crónicas, el icono fue pintado por el metropolita Pedro de Moscú (1308 1325), cuando era igúmenos el monasterio de Ratski, en Volinia. Entregó el icono al metropolita Máximo de Kiev, quien a su vez lo llevó a la catedral de la Dormición de Vladi
María ante los pobres
El Cardenal Suenens, siendo primado de Bélgica, oía con asombro que el pueblo gritaba: ¡Viva la Reina!; ¡viva Fabiola!, aún cuando ella estaba ausente.
Al preguntar el Cardenal a los que aclamaban a la Reina: ¿por qué vitoreáis a la soberana, si no está
Padre que estás en el cielo
Con la expresión «Padre que estás en el cielo» Jesús anima a los discípulos a una confianza incondicional fundada en la incomparable bondad del Padre que está en el cielo hacia sus hijos.
17 – Del ‘caos’ al ‘reposo’
La oración es toda una relación de amor que nos levanta sobre nosotros mismos. En ella se recupera a Dios; se recupera el alma y la armonía de la persona ‘entera’
Los vestidos de la madre de Dios (Rizpolozenie)
Según la leyenda, en el año 473 dos patricios de Constantinopla llevaron los vestidos de la Virgen a Jerusalén. Este acto se llama Rizpolozenie en eslavo, y Katathesis tes estëtos tou Theotokou en griego.
29. Implicación
Y es que la persona se perfecciona en la unión por amor y en la adoración en la que realiza toda su capacidad religiosa.
Jesús y las mujeres.
Jesús, cada vez que se encuentra ante una situación de marginación de la mujer, manifiesta claramente su voluntad de restablecerla en su dignidad humana; pero esto produce también escándalo en la sociedad.
28. El quebrantamiento por el Espíritu.
El quebrantamiento del hombre exterior, el hombre viejo, es la experiencia básica de todos los que sirven al Señor. El camino del servició está en el quebrantamiento, en aceptar la disciplina del Espíritu.
La palabra evangelizadora de Jesús.
Si el seguimiento como identidad cristiana es pasión por Jesucristo y proseguimiento de su causa evangelizadora, incluye también la fascinación por su forma de hablar y de comunicar.
27. Dios nos educa
Existe un afán por aprender doctrinas y nociones. Sin embargo tal interés puede ser una forma de codicia que dificulta el camino en lugar de despejarlo; no siempre tener una calidad de discípulo es aceptable.