Pascua sin tiempo, Pascua para todo tiempo
La Pascua no es una fecha concreta, o algo que ocurre porque «toca» litúrigicamente. La Pascua se reconoce por sus síntomas, que pueden tener lugar en cualquier momento, situación vital personal o comuntiaria
Saludo Pascual
Un Obispo se pregunta cómo saludar en este tiempo pascual a gentes que no tienen fácil creer hoy: cristianos y no cristianos.
Testimonio de uno de los Soldados
Las «reflexiones» que se hace uno de los soldados encargados de crucificar a Jesús y la experiencia personal de resurrección que tuvo.
Resumen del Estudio Jóvenes 2005 de la Fundación SM, tal como lo recoge J. A. Aunión en El País en su edición del 05 Abril de 2006
Menos de la mitad de los jóvenes entre 15 y 24 años (el 49%) se considera católico, mientras que hace una década se definía como tal el 77%. Así figura en el informe Jóvenes Españoles 2005, de la Fundación Santa María, dirigido por el catedrático de la Un
Como Pedro
Aquel gesto de no dejarse Pedro lavar los pies y lo que eso significaba, me han inspirado esta oración
La oración de Jesús en Getsemaní
Primera predicación cuaresmal que, ante el Santo Padre y la Curia Romana, pronunció el padre Raniero Cantalamessa en la Capilla Redemptoris Mater del Palacio Apostólico del Vaticano.
El canto más hermoso de Navidad
Historia del villancico más famoso de todos los tiempos: Noche de paz.
Hacer posible el Adviento
Cuando alguien… ¡entonces es posible el Adviento!
Sin título
¿Cómo nos posicionamos ante esto? ¿Qué nos provoca? Ponle un título, añade lo que te parezca, sugiere qué podemos hacer, cómo usarías la imagen, ¿qué les dirías a estos dos? ¿Qué significa ser «instrumentos de paz» en el mundo de las relaciones personales
La verdadera historia de Caperucita Roja (con pistas de trabajo)
Las cosas pueden no ser como siempre nos han contado. Y en todo caso, cada historia, cada acontecimiento tiene diferentes versiones, según quién nos lo cuenta. Y no siempre la más divulgada es la más verdadera.
La precariedad laboral se ceba con los jóvenes
Los jóvenes españoles (¿sólo ellos?) se sienten explotados y sobrecualificados, pero aceptan empleos que la OIT considera «indecentes»