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¿Nuevos dones para una nueva sociedad?
Como al viento al Espíritu no se le pueden poner límites. Actúa en la historia. Es Espíritu universal. Las religiones, las luchas por (ajusticia, el diálogo, la secularización, son lugares del Espíritu. Aunque se encuentre disfrazado.
Un viento impetuoso
Cuando Pablo preguntó a los discípulos de Efeso si habían recibido el Espíritu al hacerse cristianos, ellos respondieron: «No, nunca hemos oído decir que exista un Espíritu Santo» (Hech 19,1). Nosotros sí que lo hemos oído. Pero ¿qué nos imaginamos?
06. El Espíritu: música y campana
Sobre el pequeño pueblo, a orillas del Tirón, desciende el aire del Espíritu al son del campanil ligero que «toca a gloria». Casi en volandas se lleva a las alturas la diminuta cajita blanca. ¡Un angelito más al cielo!
04. Habitado, no colonizado
Cuando intento describir a quien creo que es el Espíritu, el Amor divino, me encuentro incapaz de reducirlo a una imagen totalizadora. No sé ponerle rostro. Lo percibo presencia permanente, colmando mi interior, causa de mis relaciones anteriores.
05. Rumor de Dios
Me atreveré a decir que del Espíritu sé, ante todo, por su «ausencia», aunque inmediatamente tengo que añadir que esa ausencia es mía y no de Él. Está en mí y vivo como si estuviera lejos.
