Te echamos de menos, no pasa un solo domingo sin que sintamos tu ausencia.

Te echamos de menos, no pasa un solo domingo sin que sintamos tu ausencia.
Practicados correctamente, irradian salud y bienestar al mundo, no desdén ni desprecio.
Hay amor cuando damos, como hay también amor cuando recibimos.
Con mucha frecuencia esta cuestión nos golpea con especial agresividad.
Todos somos monjes y cada uno de nosotros tiene su celda propia.
Todos nosotros somos vulnerables, dependientes, mortales, a un latido del corazón de dejar este planeta.
Se suele contar una anécdota de San Vicente de Paúl. Quizás sea mito, al menos en parte; pero, no obstante, su reto es real.
Haced con entusiasmo y fidelidad lo que el deber os pide, y eso os va a enseñar lo que necesitáis para saber llegar a Dios.
León Tolstoy dijo una vez: ‘Solo hay un camino para acabar con el mal, y ése es devolver bien por mal’.
Cuando alguien nos deja físicamente, tenemos luego la oportunidad de percibir y acoger su presencia de un modo más profundo.
Karl Rahner afirmó que llegaría un tiempo en el que cada uno de nosotros sería o un místico o un descreído.