Gracias Madre
Gracias por ser como eres: pobre, sencilla, entregada, misericordiosa.
Madre de la Palabra
Líbranos, de las interferencias de nuestro egoísmo para que vivamos abiertos interiormente al evangelio de Jesús.
RENUÉVANOS
Que nuestra fidelidad, Señor, sea dinámica y creativa, abierta al aliento de tu Espíritu…
SÓLO EL ESPÍRITU
Sólo el Espíritu puede crear y renovar la faz de la tierra, pero tú puedes liberar y acelerar esa acción con tu fidelidad de cada día.
Danos la luz de Tu Espíritu
Enséñanos a mirarlo todo con ojos cristianos, a contemplar las cosas como Cristo los ve.
Espíritu Divino
Ven, Espíritu Paráclito, concede hoy a tu Iglesia, reunida en el Cenáculo, con María, la experiencia de Pentecostés.
Queremos seguirte
Como los primeros apóstoles a quienes llamaste para que estuvieran contigo.
Nuestra misión es encontrarte
Si te descubrimos y alimentamos tu amistad, poco a poco nos haremos semejantes a ti.
Consagrados
Danos la fuerza de tu Espíritu para responder con fidelidad a tu llamada.
Ayúdanos a cruzar el desierto
Ojos que arden como lámparas votivas alumbrando el más profundo centro de nuestra alma.
Invocación a María
Una bella y sencilla oración para recitar antes de la ‘Lectio Divina’