![Jueves de la segunda semana de Adviento](https://www.ciudadredonda.org/wp-content/uploads/uplo/d//jueves2_adviento.jpg)
Jueves de la segunda semana de Adviento
La promesa se cumple, sólo hace falta estar atentos: ’El que tenga oídos, que escuche’.
![Miércoles segunda semana de Adviento](https://www.ciudadredonda.org/wp-content/uploads/uplo/d//cristo_orando.jpg)
Miércoles segunda semana de Adviento
“Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, que yo os aliviaré”.
![Lunes segunda semana de adviento](https://www.ciudadredonda.org/wp-content/uploads/uplo/d//Lunes-2-Adv.jpg)
Lunes segunda semana de adviento
Déjate perdonar: “Hombre, tus pecados están perdonados”.
![Meditación para el II Domingo de Adviento. (Ciclo C)](https://www.ciudadredonda.org/wp-content/uploads/uplo/d//ferusalen.png)
Meditación para el II Domingo de Adviento. (Ciclo C)
El Adviento es el tiempo del sobrecogimiento, porque el Señor se compadece de su pueblo.
![Sábado de la Primera Semana de Adviento](https://www.ciudadredonda.org/wp-content/uploads/uplo/d//sinagoga_cafarnaun.jpg)
Sábado de la Primera Semana de Adviento
Los discípulos reciben del Maestro la misión de hacer lo mismo: “Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos, echad demonios”
![Viernes de la primera semana de Adviento](https://www.ciudadredonda.org/wp-content/uploads/uplo/d//viernes_adviento1.jpg)
Viernes de la primera semana de Adviento
En este tiempo estamos llamados a abrir de par en par las puertas al Salvador.
Domingo tercero de Adviento
Vivimos un momento especial en el que la solidaridad es urgente ante el paro y la necesidad de comer.
Sábado de la segunda semana de Adviento
El que viene es príncipe de la paz, y tiene poder para reconciliar todas las cosas.
Viernes de la segunda semana de Adviento
La Liturgia nos llama la atención por si avanza el tiempo y no nos abrimos al mensaje liberador.
Jueves de la segunda semana de Adviento
La promesa se cumple, sólo hace falta estar atentos: ’El que tenga oídos, que escuche’.
Miércoles segunda semana de Adviento
“Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, que yo os aliviaré”.