En el exilio

Home arrow_carrot 2right icon Espacios arrow_carrot 2right icon En el exilio
Como cristianos, creemos que llevamos la imagen de Dios en nosotros y esta es nuestra más profunda realidad. Hemos sido creados a imagen de Dios. Pero concebimos esta imagen de una forma demasiado ingenua, romantica y piadosa. Imaginamos que en algún lugar dentro de nosotros hay un bello icono de Dios estampado en nuestras almas. Puede ser, pero Dios, tal y como afirma la Escritura, es más que un icono. Dios es fuego -libre, infinito, inefable, incontenible. (Ron Rolheiser, OMI)
Fe y muerte

Fe y muerte

Tendemos a alimentar una cierta ingenuidad sobre lo que significa la fe ante la muerte. La opinión común entre nosotros como cristianos es que, si alguien tiene una genuina fe, deberá poder enfrentarse a la muerte sin temor ni duda.

La frustrante batalla por la humildad

La frustrante batalla por la humildad

Es duro ser humilde, no porque no tengamos deficiencias más que suficientes para merecer la humildad, sino más bien porque hay un astuto mecanismo en nosotros que normalmente no nos deja ir al lugar de la humildad.

La gracia en la pasividad

La gracia en la pasividad

Una amiga mía cuenta esta historia. Creció con cinco hermanos y un padre alcohólico. El efecto del alcoholismo de su padre fue devastando a su familia.

El  dolor como ejercicio espiritual

El dolor como ejercicio espiritual

En un interesante libro, La voz interior del amor, escrito mientras estaba en una profunda depresión emocional, Henri Nouwen comparte estas palabras: “El gran desafío es experimentar y sobrevivir a tus heridas en vez de pensarlas.

La llegada de refugiados, antiguos y nuevos

La llegada de refugiados, antiguos y nuevos

La congregación religiosa a la que pertenezco, los Misioneros Oblatos de María Inmaculada, ha tenido una larga relación con los pueblos indígenas de Norteamérica.

Crear y mantener espacio para nuestra aflicción

Crear y mantener espacio para nuestra aflicción

Hace algunos años asistí en un fin de semana a un retiro dado por una mujer que no escondía el hecho de que no poder tener hijos constituía una profunda herida en su vida. Así que ofrecía retiros sobre el dolor de no poder tener hijos.

La invitación al coraje

La invitación al coraje

El coraje no es uno de mis puntos fuertes, al menos no un género particular de coraje. La Escritura nos dice que mientras Juan Bautista crecía, se hacía fuerte en espíritu. Mi crecimiento fue algo diferente. A diferencia de Juan Bautista, mientras yo crecía, me volvía acomodaticio en espíritu.

La pornografía y lo sagrado

La pornografía y lo sagrado

Los antiguos griegos tenían dioses y diosas para todo, incluso una diosa de la Vergüenza llamada Aidos. La vergüenza, para ellos, significaba mucho más de lo que normalmente significa para nosotros. En su mentalidad, vergüenza suponía modestia, respeto y una cierta reticencia necesaria ante cosas que debían permanecer privadas y ocultas.

Suicidio y melancolía

Suicidio y melancolía

Ya no entendemos la melancolía. Hoy agrupamos juntas todas formas de melancolía en un solo  manojo indiscriminado y lo llamamos “depresión”. Mientras los psiquiatras, los psicólogos y la profesión médica están haciendo mucho bien en favor del tratamiento de la depresión, algo importante se está perdiendo al mismo tiempo.

Dejar el falso temor

Dejar el falso temor

Recientemente, en una entrevista de radio, me preguntaron: “Si Vd. estuviera en el lecho de muerte, ¿qué querría dejar tras de sí como sus últimas palabras?” La pregunta me pilló momentáneamente de sorpresa. ¿Qué querría dejar yo como mis últimas palabras?

No cerrar con llave nuestras puertas

No cerrar con llave nuestras puertas

En su libro El Secreto, Rene Fumoleau tiene un poema titulado Pecados. Fumoleau, un sacerdote misionero que estaba con el pueblo Dene en el norte de Canadá, pidió una vez a un grupo de  ancianos que dijeran lo que ellos consideraban el peor pecado de todos.