Artículos en:

Adviento

Domingo de la cuarta semana de Adviento

Domingo de la cuarta semana de Adviento

Los textos de este domingo anuncian: “La madre está punto de dar a luz el fruto bendito de su vientre. Cristo va a entrar en el mundo. En ese momento brillará el rostro que nos salva”.La pequeña Belén se dispone para el acontecimiento. A la “Casa del...

I Jueves de Adviento (Is 26, 1-6; Sal 117; Mt 7, 21. 24-27)

I Jueves de Adviento (Is 26, 1-6; Sal 117; Mt 7, 21. 24-27)

La humildad no es complejo de inferioridad, sino conocimiento de la propia verdad, lo que somos ante Dios. Con esta conciencia de criatura, a la hora de tratar con Él, tomamos la actitud de quienes son bendecidos por tener un corazón sencillo y una mente obsequiosa con la manifestación divina.

I Miércoles de Adviento: (Is 25, 6-10a; Sal 22; Mt 15, 29-37)

I Miércoles de Adviento: (Is 25, 6-10a; Sal 22; Mt 15, 29-37)

La Eucaristía es el banquete que sacia; no seamos como los invitados que rehúsan acudir a la fiesta. Las fiestas de Navidad, en resonancia con esta profecía, se celebran con abundancia de manjares y bebidas. Sería una paradoja que intentáramos saciarnos con alimentos materiales y no comiéramos del manjar mejor.

I Lunes de Adviento (Is 4, 2-6; Sal 121; Mt 8,  5-11)

I Lunes de Adviento (Is 4, 2-6; Sal 121; Mt 8, 5-11)

Si gustas tu pertenencia a la Iglesia, si te sientes parte de ese resto que ha puesto su confianza en el Señor, y crees en la fuerza de la súplica, si no te avergüenzas de tu identidad cristiana, escucha la Palabra que hoy te dirige la liturgia.

Esperar y Vigilar

Esperar y Vigilar

Adviento significa Venida, Llegada. Durante este tiempo litúrgico las Iglesias cristianas se preparan para conmemorar, con el corazón y el espíritu preparado, hacer presente y celebrar con inmensa alegría el nacimiento de Jesús. Dos de las características principales de este tiempo que debemos potenciar son la esperanza y la vigilia.

¡No hay eventos!