El mundo tiene tanta necesidad de santos geniales como una ciudad invadida por la peste tiene necesidad de médicos
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Apuntes para creyentes
JACQUES LÖEW (1908 – 1999)
“Necesitaremos algunos buenos alfilerazos para desinflar nuestra vanidad, nuestro ‘yo’, a fin de que, haciéndonos pequeños, podamos descubrir a Dios”
RAFAEL LAPESA (1908 – 2001)
“Durante toda mi vida, la presencia de Dios
ha estado sobre mí, como algo feliz, algo salvador”.
Mª. Benedicta Daiber (1904 – 1987)
Mi padre repetía continuamente en mi presencia: ‘No hay Dios’, a los ocho o diez años era yo una atea consumada.
Madeleine Dêlbrel (1904 – 1964)
Tu vocación de contemplativa estaba en la calle, en el trabajo, en ese silencio que es posible descubrir en medio del ruido.
Adrienne Von Speyr (1902 – 1967)
Toda una existencia de unión mística y de misión eclesial, cuando sólo Dios es capaz de llenar tu horizonte.
Vivir a fondo la redención
A veces vivimos como cristianos subdesarrollados. No por mala voluntad, sino por no aprovechar todas las posibilidades que se nos han dado en Cristo. Nuestra experiencia de encuentro con el Señor se reduce casi exclusivamente a la oración y la Eucaristía
Dia del apostolado seglar
La vida del cristiano tiene que ser activa, comprometida y empeñada en la causa de Jesús, que es la causa de Dios y la causa de los hombres, la causa de la vida verdadera, la causa de la verdad y de la justicia, y por eso mismo también la causa de la salvación y de la felicidad.
Roger Schutz
Dicen que has sido una de las personas más carismáticas del siglo XX. Quienes te conocieron de cerca piensan que jamás se produjo un eclipse de fe en tu vida. Hasta que un día se enteran de que pasaste "un largo periodo de incredulidad".
Thomas Merton (1915 – 1968)
Hace años tropecé, con esta nota telegráfica: "Thomas Merton: monje y escritor norteamericano". ¡Monje, escritor, norteamericano!, tres palabras que, unidas, aguzaban mi curiosidad.
«Ars moriendi» o el arte de morir
El arte de morir se aprende durante la vida. Quien sabe aceptar las muertes que advienen, y muere una y otra vez, con belleza, con estilo, con amor, hará de su muerte un recuerdo imborrable, una obra de arte, patrimonio de la humanidad.