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En el exilio

Programas informáticos, formato moral y vivir en pecado

Programas informáticos, formato moral y vivir en pecado

Mientras estaba completando estudios de graduado en Bélgica, viví en el American College de Lovaina. Por entonces había en la plantilla del departamento de limpieza y mantenimiento una admirable mujer de color cuya energía trajo aire fresco a nuestro lugar, pero cuya historia de matrimonio de alguna manera corrió paralela a la de la mujer samaritana del evangelio de Juan.

Las indulgencias, vueltas a examinar

Las indulgencias, vueltas a examinar

 Cuando el papa Francisco anunció el Año Santo de la Misericordia, prometió que los cristianos podrían ganar una indulgencia especial durante este año. 

De la paranoia a la metanoia

De la paranoia a la metanoia

A veces somos un misterio para nosotros mismos, o quizás, más concretamente, algunas veces no nos damos cuenta de la paranoia que cargamos en nosotros mismos. Tantas cosas pueden arruinar nuestro día.

Alimentarse del fuego sagrado de la vida

Alimentarse del fuego sagrado de la vida

 Mira a los sabios y a los malvados, que se alimentan del fuego sagrado de la vida.

Estos son versos de la canción de Gordon Lightfoot titulada  Don Quijote, y destacan una importante verdad: tanto los sabios como los malvados se  alimentan de la misma energía. 

La Utopía, con límites

La Utopía, con límites

Cuando yo era niño, había una canción popular cuyo estribillo repetía esta frase: Everyone is searching for Utopia (Todos buscamos la Utopía). Sí, todos la buscamos. Todos nosotros ansiamos un mundo sin límites, una vida en la que nada vaya mal, un lugar en el que no haya tensión ni frustración. Pero eso nunca se da. No existe tal lugar.

La naturaleza de Dios – ¿Gozo o cruz?

La naturaleza de Dios – ¿Gozo o cruz?

Es sorprendente dónde puedes aprender una lección y capturar una ráfaga de lo divino. Recientemente, en una tienda de alimentación, fui testigo de este incidente: Un joven, probablemente de unos 16 años de edad, junto con otras dos chicas de su misma edad, entraron en la tienda.

Mis 10 libros preferidos de 2017

Mis 10 libros preferidos de 2017

El gusto es subjetivo. Tenlo presente mientras comparto contigo esta lista de los diez libros que más me han llamado la atención durante el pasado año. Pueden dejarte frio, o puedes enfadarte conmigo porque los elogio. Se tu propio crítico aquí y no tengas miedo a ser crítico con mi propio gusto. Nadie compra todo lo que se anuncia en una tienda.

El Niño Jesús del año

El Niño Jesús del año

Todos años, la revista Time reconoce a alguien como “Persona del Año”. El reconocimiento no es necesariamente un honor; se da a la persona a quien Time juzga haber sido el creador de la noticia del año, por bien o por mal. Este año, en vez de elegir a un individuo para concederle el título de creador de la noticia del año, se reconoció a una categoría de personas, las Silence Breakers, esto es, mujeres que han hablado claro por haber experimentado acoso sexual y violencia sexual.

El temor de Dios como sabiduría

El temor de Dios como sabiduría

¿Por qué ya no predicamos más sobre el fuego del infierno? Es una pregunta que frecuentemente se hacen hoy muchas personas religiosas sinceras a quienes preocupa que demasiadas iglesias y demasiados sacerdotes y ministros han suavizado el pecado y son super-generosos al hablar de la misericordia de Dios.

La verdadera tragedia del pecado

La verdadera tragedia del pecado

La verdadera tragedia del pecado es que, con frecuencia, aquel contra el que se peca se convierte al fin en pecador, infligiendo a otros lo que primero le infligieron a él. Hay algo perverso en nosotros, por lo cual, cuando pecan contra nosotros, tendemos a absorber el pecado, junto con la enfermedad de la que emanó, y luego combatir para no actuar de esa misma manera enferma.

Reticencia y secreto como virtud

Reticencia y secreto como virtud

En toda gente sana hay una natural reticencia a revelar demasiado de sí misma y una consiguiente necesidad de guardar secretas ciertas cosas. Demasiado frecuentemente juzgamos esto como una insana timidez o -peor- como ocultación de algo malo.