Dentro de nada empezamos la Semana Santa. Las lecturas nos han ido colocando en suerte, para que podamos entrar con plena conciencia en ese nuevo tiempo litúrgico.

Dentro de nada empezamos la Semana Santa. Las lecturas nos han ido colocando en suerte, para que podamos entrar con plena conciencia en ese nuevo tiempo litúrgico.
Estamos muy cerca de la Semana Santa, que nos recuerda y actualiza la Pasión, la Muerte y la Resurrección de Jesús. Llega su momento, el momento de cumplir su misión, y sus palabras se hacen más valientes.
Jesús habla de su Padre. Lo conoce, y, muy importante, guarda su palabra. Me miro a mí mismo, y después de muchos años de colegio de curas, de catequesis, de formación y apostolado,
Es muy actual la pregunta de Poncio Pilatos a Jesús, ¿qué es la verdad? A muchos les parece que no hay una verdad, que cada uno tiene la suya, y que todo es aceptable.
No entendían a Jesús. El Evangelio de hoy parece un diálogo de besugos. Jesús hablando de una cosa, y los oyentes, pensando en otra. Es lo que tiene ser de abajo y ser de arriba. ¿De dónde somos nosotros?
Imagino que, para la mujer, estas palabras serían como un bálsamo para el alma. Al borde de la muerte (y vaya muerte, apedreada), sabiéndose culpable (pillada in fraganti) y sin esperanzas, de repente se ve libre. Sola, delante de un hombre que, sin violencia ni gritos, se ha librado de todos los acusadores.
Dentro de nada empezamos la Semana Santa. Las lecturas nos han ido colocando en suerte, para que podamos entrar con plena conciencia en ese nuevo tiempo litúrgico.
Estamos muy cerca de la Semana Santa, que nos recuerda y actualiza la Pasión, la Muerte y la Resurrección de Jesús. Llega su momento, el momento de cumplir su misión, y sus palabras se hacen más valientes.
Jesús habla de su Padre. Lo conoce, y, muy importante, guarda su palabra. Me miro a mí mismo, y después de muchos años de colegio de curas, de catequesis, de formación y apostolado,
Es muy actual la pregunta de Poncio Pilatos a Jesús, ¿qué es la verdad? A muchos les parece que no hay una verdad, que cada uno tiene la suya, y que todo es aceptable.
No entendían a Jesús. El Evangelio de hoy parece un diálogo de besugos. Jesús hablando de una cosa, y los oyentes, pensando en otra. Es lo que tiene ser de abajo y ser de arriba. ¿De dónde somos nosotros?